Ioannis Anthoulis es un hombre joven de 37 años que lleva más de 20 años trabajando con sistemas agrícolas de trashumancia. Sucedió a su padre en la gestión de las actividades de la granja. En la actualidad, es propietario de una gran granja ecológica con 3000 ovejas, 50 cabras y 200 bovinos.
Ioannis Anthoulis
2000
Potamia, Greece
Los productos básicos de la práctica ganadera trashumante son la leche, la carne, los productos queseros (feta, graviera, manouri) y la lana.
Granja
Pastos de verano
El abuelo de Ioannis Anthoulis fundó la granja y después su padre continuó esta tradición. Desde que tenía 14 años, Ioannis Anthoulis ha sido un agricultor activo. Toda la familia se ha trasladado a lo largo de los años a la misma región en invierno y en verano. Durante el invierno, la familia permanece en el pueblo de Blaxogianni, en la zona de Elassona. En verano, la familia vive en el pueblo de Samarina, en la prefectura de Grevena. Los niños se trasladan a las montañas cuando termina la escuela. Ioannis Anthoulis terminó el bachillerato y asistió a un centro de formación profesional en informática. Sus conocimientos son empíricos y se transmiten de generación en generación.
Categorización y códigos Corine de la Cubierta Terrestre:
Ioannis Anthoulis ha certificado razas ovinas como Sarakatsaniko y Mpoutsiko y la raza bovina Roja.
Hace quince años, el movimiento era vertical a pie. Hoy, Ioannis Anthoulis traslada su rebaño de las tierras bajas a las altas con vehículos durante el mes de mayo. Necesita unos 17 vehículos. Por tanto, gasta mucho en este traslado. La familia también se desplaza con vehículos. En octubre, Ioannis Anthoulis se desplaza de las tierras altas a las bajas a pie durante unos 12-20 días. Sólo los animales enfermos se trasladan con un vehículo.
La mayor parte de la producción de carne se vende a la empresa «Farma Elassonas». Además, Ioannis Anthoulis vende una cantidad menor a su carnicería del pueblo de Samarina durante el verano. La producción de leche se vende a una fábrica de queso. Sin embargo, Ioannis Anthoulis produce 500 latas de queso feta y una pequeña cantidad de kefalograviera y queso manouri, que vende por su cuenta. por su cuenta. La lana no se vende.
Además del trabajo que realiza su familia, Ioannis Anthoulis emplea a siete trabajadores fijos para que le ayuden con el ganado. Nos informa de que tiene problemas para encontrar trabajadores dispuestos a trabajar en su granja durante todo el año. Durante muchos años, empleó a emigrantes de Albania y Bulgaria. Por desgracia, muchos cambiaron de ocupación o volvieron a sus países de origen. Así, la posibilidad de tener trabajadores es limitada.
Otro problema es la falta de comprensión de la gente, que no sabe lo que es la ganadería trashumante ni su importancia. Ioannis Anthoulis y sus trabajadores se enfrentan a importantes problemas, sobre todo cuando se acercan a zonas residenciales con su rebaño. Nos dio el ejemplo de su padre, al que la policía paró para un control. Como no llevaba su identificación, se vio obligado a dejar solos a los animales durante varias horas. Como consecuencia, se produjeron daños importantes porque nadie podía proteger al ganado de los animales salvajes. Además, Ioannis Anthoulis afirma que el desplazamiento a pie contribuye al bienestar de su rebaño.
Ioannis Anthoulis cree que la trashumancia es una forma de vida. Se dedica a los animales desde que tenía cuatro años. Recuerda seguir las rutas tradicionales y lo considera una experiencia única. Le gustan los animales, las montañas, pero también todo el proceso de la trashumancia en movimiento. No obstante, la razón por la que continúa en este trabajo es porque es la principal fuente de ingresos para él y su familia.
Ioannis Anthoulis mencionó que dispone de razas autóctonas, bien adaptadas al entorno del país griego, pero de bajo rendimiento.
Ioannis Anthoulis opta por tener una granja ecológica, que le proporciona mayores ingresos. Es sabido que los precios de la leche ecológica son más altos, y los productos ecológicos tienen mayor calidad.
A Ioannis Anthoulis le gustaría que el Estado le diera más incentivos para mantener sus razas y no le obligara a utilizar razas mejoradas para obtener más beneficios. No le gusta utilizar razas mejoradas porque quiere seguir la forma tradicional de realizar la trashumancia. Por ello, sigue ordeñando sus animales a mano en las montañas. Actualmente, el rebaño es muy grande, y no tiene tiempo para ocuparse de nada más que de su práctica actual.
Ioannis Anthoulis cree que los pastizales, cuando se gestionan adecuadamente, pueden cubrir las demandas de los animales sin ningún suplemento por parte de los agricultores. Considera que la vegetación de los pastos de montaña es muy rica, y que da un valor añadido a sus productos.
Ioannis Anthoulis se comunica con otros agricultores a través de Facebook. No tiene formación, aparte de sus conocimientos empíricos.
Ioannis Anthoulis cree que los problemas causados por la escasez de personal podrían obligarle pronto a reducir el rebaño y crear una pequeña empresa para vender sus productos.
Ioannis Anthoulis cree que los programas para jóvenes agricultores no ayudan mucho a convertirse en agricultor trashumante. Los costes para la compra de animales y la infraestructura adecuada son muy elevados. Los jóvenes agricultores deberían disponer de su propio dinero para iniciarse en el negocio.
Por otra parte, Ioannis Anthoulis no sugeriría a un joven que se iniciara en la trashumancia si no tiene la experiencia adecuada. Considera que la persona debería unirse a un practicante de la trashumancia y luego decidir si se convierte en agricultor trashumante o no.
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